Pasaron 15 mil weás desde la última vez que nos aparecimos por acá hace 8 meses, 8 meses que en realidad fueron como 8 años, a saber:

  • Se fue Brady de los Patriots.
  • Pato Mahomes se transformó en el Rey Midas de esta cuestión.
  • Los 49ers, y otra vez Shanahan, se farrearon el Super Bowl.
  • Brady firmó con los Bucs e hizo volver a Gronk del retiro.
  • Tuvimos un Draft vía zoom con el commish poco menos que presentando los picks en calzoncillos desde el sótano de su casa, recién levantado y con olor a poto.
  • La remota chance de tener a un chileno jugando en la NFL, el hombre está trabajando duro para ello  y desde esta humilde tribuna lo bancamos a muerte.
  • Varios equipos renovaron logo de cara a la nueva década.
  • El hipermega estadio de Elei ya terminado.
  • Las Vegas recibiendo a los Raiders, estadio nuevo incluido.
  • Y alguna más que se nos escapa ahora.

Sin duda alguna lo más relevante de este 2020 se gestó en la lejana China el día en que a un concha de su puta madre desviado hijo del pico se le ocurrió follarse a un murciélago en un mercado más insalubre que dormitorio de veinteañero otaku y dio origen al peor virus que nos ha tocado vivir como humanidad desde la llegada del Axé (o al menos eso nos quieren hacer creer), se esparció por todos lados el bicho de mierda ese que hasta el día de hoy nos tiene hasta más arriba del pico, y así será hasta que no haya una vacuna que nos devuelva a la puta normalidad.

No sé si la NFL habrá puesto en duda el desarrollo de la temporada que está por iniciar, tal como lo anticipamos por allá por abril cuando este servidor estaba encerrado y llevaba como 3 semanas sin pegarse una ducha, la liga tenía el factor tiempo a su favor, y eso al final permitió al menos que no se viese alterado el calendario de la temporada regular, aunque pasándose la preseason por el ñacson sosí. La pregunta que nos hacemos ahora es ¿Qué pasará si un jugador resulta contagiado durante el transcurso de la temporada? En la MLB se paralizan las actividades del equipo en cuestión por unos días, lo que la flexibilidad de su calendario permite, pero acá no existe ese margen, así que mejor no quiero ni pensarlo.

 

Les presento a un amigo:

 

A propósito de la preseason, al no haberse jugado este año, obviamente veremos varios partidos de mierda en las primeras semanas de esta nueva temporada, septiembre será una poronga mientras los jugadores vayan agarrando ritmo de competencia, algo que pasa todos los años en todo caso, pero que ahora se multiplicará al no haber público por lo demás.

Y bueno, a pesar de todo aquí estamos otra vez, otra temporada más del único Power Ranking de la NFL hecho en Sudamérica. Sean todos ustedes bienvenidos al quinto año, el último de mi rookie contract (?), del Power Ranking Popular de Ene Efe Ele Chile, el Power Ranking que le gusta a la gente.

 

 

NOTA: Nunca está de más señalar que los puestos en este primer Power Ranking de la temporada, están comparados con el último que hubo el año pasado, exactamente tras la semana 17 del 2019.

 

Patrick Efraín Mahomes Quintanilla, qué hombre, el más pijudo hoy en día, el verdadero big boss no como el nefasto culiao de Mañaweas que en el Super Bowl demostró ser más duro que infancia en Haití y luego comandó la remontada que le terminó dando el anillo a los Chiefs en Miami. No creo que le haya hecho falta retirar su 10% para renovar la tele después del pedazo de contrato que firmó, bien merecidas las lucas en todo caso. Ahora solo le queda dominar la liga durante toda esta nueva década, y como acérrimo fanático del kétchup que es, tiene todo para hacerlo de la mano de un come hamburguesas de elite como lo es Andy Reid.

Faltaban 6 minutos y ganaban por 10, habían mantenido a raya a los Chiefs durante todo el partido y simplemente ratificaban ser el equipo que había llegado mejor preparado a enero, pero les vino el síndrome “Hola, soy Kyle Shanahan y me hice caca” y se lo farrearon, se les acabó el estanque y entre Kelce, Mahomes y Demian Williams los hicieron pico, tan cerca y tan lejos a la vez por la chucha. Mantienen prácticamente mismo roster del 2019, salvo el retirado Joe Staley (llega Trent Williams en su lugar) y DeForest Buckner (se fue a los Colts), la base es la misma que los llevó a jugar el último super domingo y ahora no se espera menos que el anillo en la bahía, cualquier otra cosa sería un fracaso.

Se hicieron las cosas bien durante toda la temporada regular, Lamarcito esquivaba rivales corriendo con el PENE y ganó el MVP, pero a la primera de cambio los Titans les pararon el carro y adiós al sueño. Para esta temporada el plan es similar, correr como se estuviese arrancando de un weón tosiendo, funcionó a la perfección hasta diciembre, así que para qué cambiar la idea, al menos hasta que el resto le logre tomar la mano tal como lo hizó Tennessee en los playoffs divisionales ¿Qué pasará con Earl Thomas? ¿Jugará en algún lado este año o se acabó ya su carrera tal Antonio Down?

No importa quien llegue o quien se haya ido, mientras se mantengan Russell Wilson y Pete Carroll los Seahawks siempre serán contendientes ¿Se acuerdan que el año pasado quedaron a media yarda de ganarle la división a los 49ers? No hay equipo más aguja en la liga que ellos, siempre estarán metidos en la pelea a pesar de las lesiones. Ya no existe la Legion Of Boom, pero llegó Jamal Adams, el mejor safety de la liga. Se aspira como siempre a llegar lejos.

¿Acaso esta será la última oportunidad que tendrá Drew Brees como leí por ahí? La temporada pasada se suponía que iban a dar el gran golpe tras el robo contra los Rams en esa final de conferencia, pero los Vikings se encargaron de ellos en el Wild Card y no sirvió de nada la temporada ANAL que se aplicó Michael Thomas. Oh, debutan contra los Buccaneers de Tom Brady (qué raro decir eso por la chucha) con todo lo que ello significa, es ahora o nunca muchachos.

Los Packers estuvieron a media yarda de quedarse con el #1 de la NFC la temporada pasada, y volvieron a jugar una final de conferencia tras varios años dando jugo, pero no se presentaron, o algo así, porque cero posibilidad les dieron los 49ers en la bahía. El trabajo de LaFleur en su primer año como HC de los quesitos fue impecable y vamos a ver si logra ratificarlo esta temporada. Una de las grandes novelas en la offseason fue lo que sucedió con la elección en el Draft del QB del amor, lo que no le gustó nada a Aaroncito que pedía un WR que no llegó. Obviamente por ahora el lugar de Rodgers no corre peligro, de hecho Love estará con el serrucho para aprender desde un inicio de él, el tema será el día que le toque tomar ese lugar, porque mucho se habló de ello tras ese pick de primera ronda, y tarde o temprano pasará.

Luego de lo visto durante la pasada temporada, donde estuvieron a nada de jugar playoffs divisionales por primera vez desde 1995, suponemos que este año será el del golpe definitivo. Una evolución que se ve claramente, una defensiva que se echó el equipo al hombro durante gran parte del 2019 y un Josh Allen que cada día está más consagrado. Llega Stefon Diggs, el WR de categoría que por ahí faltaba y que sin duda se transformará en el principal target semana a semana para el ex de Wyoming. Con el nuevo panorama abierto en la AFC East tras la marcha de Tom Brady a Tampa, más de uno los da como favoritos a ganar la división, ojo con estos Bills.

Los Titans se tomaron por asalto los últimos playoffs, primero en el Gillette terminando para siempre con el tándem Brady-Belichick y luego en Baltimore cerrándole todos los caminos a Lamarcito y compañía y sucumbiendo recién en la final de conferencia contra el Pato Mahomes. Vimos la mejor versión de Derrick Henry mientras dejaba marcado su enorme miembro en el piso en cada acarreo y a un Tannehill que nunca jugó en los Dolphins como lo hizo en Tennessee desde que tomó la posta del hawaiano. La vara quedó bien alta para este año y hay con qué darle para al menos igualar lo hecho en el 2019.

Año 1 después del GOAT, inicia una nueva era en New England tras la ida de su jugador emblema, ya no habrá más un Tom Brady ahí echándose el equipo al hombro y siendo ese líder que les hizo ganar todo año tras año, será raro ver a otro ahí tomando su lugar, más encima porque Cam Newton es un QB muy distinto, que en todo caso si logra mantenerse sano (algo que no ha sucedido los últimos años y por ahí va la incógnita), lo veremos muy cerca de su versión 2015, porque además lo tiene a Belichick, que sigue siendo el amo y señor ahí, así que obviamente no vamos a descartarlos nunca mientras él siga, incluso nos la vamos a jugar con que harán una mejor campaña que la del año pasado, donde fue la defensiva (que sufrirá las bajas de Kyle Van Noy, Jamie Collins y Danny Shelton) la que terminó dando la cara. A ver qué tal sale la renovación, si mejora la OL y Newton no empieza con sus problemas físicos, serán los mismos Patriots de siempre.

Revolución total, ni el más optimista aficionado de los Buccaneers habrá soñado con tener a Tom Brady y a Rob Gronkowski juntos en su equipo más Leo Fournette, es que hasta no sé, enero, nadie se imaginaba eso. Por acá éramos de los que creíamos que Brady no se iba a retirar, pero que nunca iba a dejar de jugar en los Patriots. El impacto de su salida de New England dentro de la liga no tiene nada que envidarle a cuando la Pulga Rodríguez dejó Atlético Tucumán, en fin. El hype es gigante con este equipo, nivel Browns 2019 pero con un HC en serio, porque Bruce Arians es de lo mejor que hay en la liga. Ese debut en el Superdome es sin duda alguna el gran partido de la semana 1, yo ya me sobo las manos.

Los Eagles ganaron en el 2019 la división más corneta que hubo, fueron los menos malos de la NFC East, en parte gracias a la cantidad industrial de lesiones y todo lo que hubo que parchar sobre la marcha, mala cuea que tuvo su punto máximo en el propio partido de Wild Card con la conmoción que sufrió Wentz en el primer cuarto tras un golpe bien polémico propinado por Jadeveon Clowney, en ese mismo instante se acabó la temporada para ellos. Uno imagina que para este nuevo año vienen más fuertes que nunca, partiendo de cero, con todos enteros y con ganas de ratificar su chapa de candidatos bajo otras condiciones que las vistas durante la pasada campaña. El debut es facilito en Washington.

Hasta que por fin se fue el zanahoria Garrett, el Mario Salas de la NFL, nos tenía a todos podridos con sus aplausitos de mierda y las ganas que nos daban de decirle que se los metiera bien por el culo. Llega Mike McCarthy, uno que sabe y que de seguro le dará nuevos aires a este equipo lleno de talento. Prescott tendrá toda la temporada para demostrar que merece ese contrato por el que viene webeando hace rato, para ello deberá dejar de combinar buenas con horribles y volver a su versión 2016, de otra forma lo más probable es que termine yéndose a un equipo poronga con espacio salarial que le pague lo que pide en la próxima offseason.

Los Vikings quizás dieron la gran sorpresa de los playoffs pasados cuando en el Wild Card se sirvieron a domicilio a los Saints, ese día el primo disipó todas las dudas que aun había sobre él y este equipo demostró estar para cosas grandes. Algo desmantelados llegan a esta nueva década sosí, ya no contarán ni con Stefon Diggs, ni Xavier Rhodes, ni Tre Waynes, ni Everson Griffen, 4 titularísimos, y quizás ahí están todas las dudas, en cómo lograrán sobreponerse a tantas bajas.

De no ser por Deshauncito Watson y el recién casado de JJ Watt, odiaríamos a muerte a los Texans tal como ya lo hacemos con Bill O’Brien ¿Quién chucha cresta mierda en su sano juicio tradea al mejor WR de la liga? ¿Cómo mierda se deshace así como así de DeAndre Hopkins? ¿Está enfermo del culo? ¿Se contagió de COVID y le afectó a las neuronas? Bueno, siempre ha sido así en realidad, sobre todo cuando tu equipo le anota 21 puntos en el 1Q a los Chiefs en Arrowhead y en el 2Q te anotan 28 de vuelta. Así como Watson y Watt son las razones por las cuales los Texans pueden pelear por algo, las tendencias autodestructivas de O’Brien son las razones por las cuales este equipo se puede disparar en las patas otra vez ¿Debutan en el mismo lugar donde pasaron del cielo a la tierra en los playoffs divisionales? Pfffffff.

Dan Quinn estuvo pasao a gladiolos tras perder 7 de los primeros 8 el año pasado, vino la bye week y les sentó bien, ganaron 6 de los últimos 8 y dejaron una buena última impresión, lo cual le aseguró la pega un año más a su HC. El ataque terrestre se refuerza, o algo así, con Todd Gurley, que llega en una rodilla y difícilmente logre igualar sus mejores campañas. Me gusta mucho la llegada de Dante Fowler Jr, quizás nadie más adecuado para llenar el vacío dejado por Vic Beasley ¿Cuánto tiempo le quedará de vigencia a Matt Ryan?

Nuevo estadio, nuevo logo, nuevo uniforme, los Rams inician la década totalmente renovados en su imagen. Fueron el único equipo con record sobre .500 que no clasificó a playoffs la pasada temporada, y el gran problema ahora viene con la cantidad de bajas importantes durante la offseason (Gurley, Fowler, Cooks, Littleton, Zuerlein, Matthews), por lo que se viene un desafío importante y bien empinado para McVay y su staff de cara a seguir haciendo rendir a este equipo como lo han hecho desde que asumieron en el cargo. A ver qué tal les resulta.

Los Steelers se mantuvieron en la pelea hasta bien entrada la temporada regular, pero sin una ofensiva decente iba a ser imposible, la defensiva era de lo mejor de la liga, pero el ataque sufrió de todo, hasta un homicidio frustrado a su QB en cancha. Si no se lesiona Big Ben en algún momento de la temporada (cosa que viene pasando prácticamente todos los años), algo tendrán que decir ¿Cuánto crédito le quedará a Tomlin?

VOS TENÍS QUE SER DE HUACHIPATO, PENDEJO CULIAO PAJERO PUÑETERO CRÓNICO CON TU POLERA DE MIERDA, NO SURFEAS, NUNCA HAS SURFEADO.

Denver fue otro equipo que partió como el hoyo y se fue recuperando sobre la marcha durante el 2019, Vic Fangio encontró la fórmula y terminaron siendo bastante presentables. Llega Melón con vino desde los Chargers, así que nos imaginamos ese hermoso duo que armará con Phillip Lindsay a la hora de acarrear. Drew Lock parece estar consolidado como QB y si la defensiva acompaña como suele hacerlo, veremos a unos Broncos de temer.

Pocos equipos sufrieron más que los Colts el año pasado, el retiro del QB franquicia pegó duro y Frank Reich hizo lo que pudo para mantener el equipo a flote. Me encanta la llegada de Phillip Rivers, de características similares a las que tenía el finao Luck, el futuro Hall of Famer afrontará el que quizás sea el último año de su carrera lejos de sus Chargers y con el estanque todavía intacto. Otra llegada brutal es la de DeForest Buckner, sumada además a la de Xavier Rhodes. A este equipo perfectamente podríamos verlos peleando bien arriba si no empiezan a webear las lesiones, porque potencial hay de sobra.

Desde que se confirmó la llegada de Nick Foles en marzo es que sabemos que tarde o temprano va a tomar el lugar del Micho, es inevitable, la gente se va a aburrir de Trubisky, Seth Rollins la romperá con sus “I’ hate football” y el ataque se verá renovado para cuando debute el MVP del Super Bowl LII. La defensiva otra vez será lo mejor que tengan, si bien se fue Leonard Floyd, Robert Quinn llega para llenar el cupo. Toca debutar en Detroit.

VIVAAAAAAAAA LAS VEGAS decía el rey en uno de sus temas más famosos. Los Raiders finalmente no se resistieron a la tentación y se fueron al paraíso de las apuestas y el puterío 24/7, era que no si hasta con estadio nuevo se puso la ciudad, que acoge a su segunda liga profesional tras la llegada de los Golden Shower, o como quiera que se llamen, de la NHL.

El proyecto de Jon Gruden continúa su marcha, es ya el tercero de los 10 años de su contrato y algo ya se terminó viendo a fines del 2019, lo dejaron hacer y deshacer a su antojo en su primer año y ya podemos decir que el equipo está armado según sus planes. El cambio de sede y de aire se presenta en el momento justo en el cual ya hay que dar ese paso adelante tras los avances vistos el 2019.    

Los Dolphins hace un año eran una total mierda, tradearon hasta al que limpiaba los baños a cambio de picks y tuvieron un inicio de campaña horrible donde los humillaban de lo lindo por todos lados, pero poco a poco los jugadores le empezaron a creer a Brian Flores y el equipo fue de menos a más, pasando de ser un vagabundo destarlatado que hacía caca en la calle en septiembre a una persona de bien, afeitado, con trabajo y vida estable en diciembre. Tua Tagovailoa era el objeto de deseo desde el día 1, ya lo tienen, y lo llevarán de a poco tras su lesión en noviembre, comenzará como backup de Fitzpatrick, que tuvo el mejor mes en la historia de un QB en diciembre o algo así, y uno apuesta a que en algún momento de la temporada tomará la titularidad. El ataque terrestre era nulo el 2019, llegaron Jordan Howard (que estando sano es top 5) y Matt Breida (un camión), la defensiva se reforzó con nombres de lujo como Kyle Van Noy y Byron Jones (qué dupla de esquineros va a formar con Howard oye), además de la llegada de Shaq Lawson. Solo queda consolidar el proyecto.    

El beisbolista de seguro se puso a saltar en una pata cuando se enteró que este año le iba a lanzar pases a DeAndre Hopkins, refuerzo de lujo para esta ofensiva que contará un año más con el jugador favorito de este ranking, Sir Larry Fitzgerald <3 ¿De verdad son tan altas las expectativas para este año? Ver para creer.

Los Panthers quedaron totalmente descabezados tras la temporada 2019, se fueron Ron Rivera, Cam Newton, Greg Olsen y se retiró Luke Kuechly, el verdadero emblema de este equipo, el mejor linebacker de toda la década pasada. No les quedó casi nada, si hasta Kyle Allen dejó el equipo, así que culo blanco deberá multiplicarse tal como lo ha hecho las últimas 2 campañas, donde corría y atrapaba pases, ahora también tendrá que lanzarlos una vez que el recién llegado Bridgewater vuelva a hacerse pico una rodilla. Poca fe les tengo con tanto cambio para serles sincero, considerando la división de la conchesumadre que les toca este año con los Buccaneers armados hasta los dientes más la amenaza que representan Saints y Falcons.

La frase que más escuché sobre los cafecitos durante el 2019 fue “todos los años tenían un equipo de mierda y un buen HC, este año tienen un buen equipo, pero un HC de mierda”*, un montón de individualidades pero pésimamente entrenados y con una OL que apestaba, por lo que se reforzaron para esta campaña con Jack Conklin y eligieron en la primera ronda del draft a Jedrick Willis, el mejor OT que había disponible. Hay obviamente nuevo HC también y esperamos que Miles Garrett no vuelva a sufrir del síndrome Mea Culpa, porque otra vez que le vengan los Boris Yeltsin y termina entrevistado por Carlos Pinto en la cana. Talento hay, y mucho, lo mismo decíamos hace un año, Kitchens ya chocó la Ferrari y esperamos que Stefanski sí la haga rendir.

¿Así que a OBJ le gusta que le hagan caca encima? Se la tenía guardada el hombre. Me acordé de una entrevista a la Geisha cuando se acordó que un chino culiao le pidió que se cagara en su pecho, muy sexy y eco friendly todo.

*Frase dicha en varios de nuestros podcasts por Santiago Tomasi ¿O era Adrián Cobo? Da lo mismo, son la misma persona.

Hasta que finalmente Elisha anunció su retiro, quizás uno o dos años tarde, pero lo comido y lo bailado no se lo va a quitar nadie. Llega un HC de la escuela de Bill Belichick (ya sabemos lo que eso suele significar) y Daniel Jones arranca como titular desde el día 1 con el zanahoria Garrett como nuevo OC y un Saquon que será nuevamente el principal agente ofensivo. Ya llevan 3 años comiendo mierda, es hora de cortar el webeo y ponerse serios.

Después de 2 años con el guatón culiao y su barba llena de ladillas al mando con un record acumulado de 9-22-1, debe ser poco el crédito que le va quedando, tanto a él como a los pelotudos que echaron al siempre noble de Jim Caldwell para llevarlo a él. La defensiva llega con un montón de cambios, eligieron al mejor CB que había en el Draft para llenar el vacío dejado por Darius Slay y llegaron además Desmont Trufant, Jamie Collins y Danny Shelton. Veremos qué tal Stafford tras un 2019 roto, talento hay por todos lados y buena parte dependerá de Patricia, ya no le queda margen.

Nuevo estadio y nuevo logo, tal como los Rams, con quienes compartirán el hipermega Sofi Stadium. La pregunta que nos hacemos ahora es ¿Cómo conchetumare van a llenar esa nave espacial si ni siquiera eran capaces de llevar gente al complejo turístico donde jugaron hasta el año pasado? Este año al menos no será tema por la pandemia ¿Pero desde el 2021 acaso jugarán en familia? Además, ya no lo tienen a Felipito Ríos, ni a Melvin Gordon, ni a Okung y más encima Derwin James se perderá toda la temporada por lesión ¿Tyrod Taylor inicia como titular? Que mejor ni se presenten.

Llegó la hora para Joe Burrow, el college le terminó quedando chico, se fue de LSU como el QB con la tula más larga de la historia y pareciera que está pintado para la NFL, donde llega para comandar desde el primer día una ofensiva de peso, partiendo por el recuperado AJ Green, continuando con Joe Mixon y teniendo al velocista Joe Ross y a Tyler Boyd como buena comparsa para estar a la altura del puesto que por muchos años fue de Andy Dalton. Después de un 2019 como el culo, nada podrá ser peor para los Bengals, solo queda mirar hacia adelante.

Poco y nada queda de ese equipazo que jugó final de conferencia hace 3 temporadas, después de eso volvieron a ser la misma mierda que han sido durante casi todo el siglo XXI. Las idas de Calais Campbell, AJ Bouye, Ngakoue y Fournette son solo señales que ya hablan de un tanking por Trevor Lawrence, el más que seguro primer pick en el Draft del 2021. Ya es el equipo del bigotón Minshew, Foles se fue a Chicago y veremos qué será capaz de hacer en un equipo que parte bien limitado y más pensando en la próxima campaña que en esta.

Cuando era cabro y jugaba las primeras versiones del PES en el Play 2, me encontraba con puros nombres genéricos al no existir las licencias propias de este tipo de juegos, así, la Juventus era el “Piamonte”, el Barcelona “Catalunya FC”, el Liverpool “Merseyside Red”, el Arsenal “North London”, el Manchester United “Man Red”, etc, pues bien, esa misma sensación tengo con el Washington Football Team, el nombre más random en la historia de la liga. La única razón por la cual uno ve que puedan salir del fondo del hoyo en el que están tiene nombre y apellido: Ron Rivera, un señor HC, un hombre serio y capaz de arreglar el cagazo que Dan Snyder tiene hace años dentro de la franquicia, se trae consigo a Kyle Allen, que más temprano que tarde va a tomar el lugar del niño ese que hicieron debutar el año pasado y con el corte a Adrian Peterson, quizás quién vaya a correr ahí. Chase Young para muchos era el mejor jugador de todo el Draft, incluso por sobre Burrow, así que su impacto en la liga debería ser inmediato. Hay toda una temporada por delante para revertir el panorama con el que inician el año, pero por ahora solo les alcanza para ser el equipo de este Washington:

El Washington

¿Por qué dejamos últimos a los avioncitos? Porque Adam Gase es un pelotudo, que de seguro cuando comenzó la pandemia fue al supermercado y se trajo puros rollos de confort en lugar de alcohol gel y jabón líquido, muy probablemente sea también de los que no sepan usar la mascarilla, que deja su nariz descubierta y ni siquiera cache cómo obedecer los protocolos ¿Por qué creen que se fue Jamal Adams? Por él poh. Candidato cantado al hot seat desde ya, aunque al menos se irá con el culo bien limpio cuando le den la senda patá en la raja.

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