En el partido que dio comienzo a la novena semana de competición, el equipo de Green Bay logró su sexta victoria de la temporada y por el momento, se ubica en el primer lugar de su división, luego de perder en casa hace menos de una semana. Por su parte, el conjunto de San Francisco perdió por segunda vez consecutiva y quedó relegado al fondo de su grupo, siendo el único equipo de ese sector que tiene más derrotas que victorias (4-5).
Desde el comienzo, los Packers marcaron diferencia con buen juego y buena ejecución. Aaron Rodgers y Davante Adams fueron los grandes protagonistas de la noche, Aaron Jones lució bien después de un par de semanas de ausencia. Pero también, se notó mucho la cantidad y calidad de las numerosas bajas que tienen los 49ers por lesión. Tanto así, que la línea ofensiva quedó debilitada y la defensiva está quedando expuesta.
- Pegando desde el comienzo: en la primera serie, los Packers marcaron diferencias por la rapidez en la que impusieron su patrón de juego usando diversos motions, que en muchos casos ayudaron a crear espacios para sumar yardas y avanzar progresivamente en la cancha. De hecho, en un principio Aaron Rodgers jugaba muchos pases cortos con jugadores que estaban muy desmarcados, producto de esos motions. Los tiros largos y posteriores anotaciones caerían por sí solas. De hecho, las seis marchas anotadoras de Green Bay (4 touchdowns + 2 field goals) surgieron en posesiones de al menos seis jugadas. Es más, en la segunda mitad consumieron casi dos tercios del tiempo con el balón.
- Aaron & Aaron: por supuesto, el estelar quarterback de los Packers fue protagonista jugando muy cómodo. Siempre tuvo tiempo para identificar duelos favorables y encontrar a receptores desmarcados, como también supo desplazarse ante la presión. Por tercera vez en el año, Aaron Rodgers superó las 300 yardas (terminó con 305 anoche), tuvo su mejor rating de la campaña (147.2) y su balance de touchdowns/intercepciones fue 4/0, algo que logra por cuarta ocasión en la temporada. Impactantes fueron los pases largos, con Davante Adams al principio y luego, con Marquez Valdes-Scantling. Por su parte, Aaron Jones regresó a la alineación empacadora y fue importante en la primera mitad, para atacar espacios y lograr yardas posteriores a los pases cortos que fueron hacia él. El corredor terminó el juego con 79 yardas en 20 toques, nada mal considerando sus dos semanas de ausencia.
- El Show de Davante: cabe preguntarse si el # 17 de Green Bay es el mejor receptor de la liga y también cabe preguntarse si el dúo Rodgers – Adams es el mejor del momento. El nivel de entendimiento entre el mariscal y el receptor quizás no lo tenga ninguna otra dupla dentro de la liga. Se nota porque cuando Rodgers lo busca no duda en tirarle el balón a Davante Adams, ya sea en rutas largas o en tramos intermedios. Además, la confianza que exhibe Adams quizás muy pocos jugadores la tengan. Atrapa muchos pases, varios de alta dificultad y es muy difícil pillarle algún drop. Anoche, atrapó 10 pases de 12 que fueron su dirección, sumó 173 yardas y anotó el primer touchdown de la noche. Aquella jugada fue de 36 yardas y Davante atrapó el balón dentro del endzone, casi pegado a la línea lateral y con marca encima. Lleva ocho recepciones de TD, en este momento encabeza el torneo en ese rubro.
- Mineros a la deriva: los 49ers tienen muchos jugadores lesionados y varios importantes, como Jimmy Garoppolo; Deebo Samuel y George Kittle. El equipo quedó debilitado, al grado que hasta la línea ofensiva no brinda garantías. Nick Mullens hace lo que puede. Anoche, se vio dubitativo y condicionado por llevar las riendas de la ofensiva, ante la tempranera ventaja que lograron los Packers. Mullens solo sufrió una captura, pero estuvo asediado en todo el partido, y tiró una intercepción la cual cayó debido a la presión de Preston Smith quien alcanzó a golpear al pasador, justo al momento de soltar el balón. Pudieron caer más intercepciones, de no haber sido porque el propio Preston y Darnell Savage dejaron caer balones. La defensiva de San Francisco tampoco se salva. Anoche, Rodgers aprovechó todas las confusiones que hubo en cobertura, sobre todo en pases largos – al jugar con formaciones de cuatro receptores, quedaban receptores descubiertos. Un ejemplo fue el TD de Valdes-Scantling, superó a su marca y nunca llegó ayuda en cobertura.
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