Para empezar: el partido inaugural, definido al último minuto (Bucs 31, Cowboys 29). El primer Monday Night, dos field goals al final del último cuarto y posterior definición en la prórroga (Raiders 33, Ravens 27). Si existen dudas sobre la NFL como el mayor espectáculo deportivo del mundo, partidos como estos hacen despejar cualquier incógnita. Al margen del suspenso y de haber presenciado todo en primetime, dio gusto ver partidos bien jugados en la primera semana de competencia. Todos sabemos que al comienzo de la liga, hay muchos equipos aún en rodaje. Por lo mismo, uno valora demasiado estos partidos de alto nivel en la semana del Kickoff.
Desglosando esos encuentros: se confirmaron los vaticinios previo al jueves pasado. Aparte de ser los campeones vigentes, los Tampa Bay Buccaneers están en plenitud. Les tomó menos de un cuarto entrar en ritmo y a esta altura, como buen equipo que son, simplemente fluyen. Impresionó ver a Brady, sobre todo porque su forma exhibida parece más de mitad de año que de comienzo de año. Hasta parece que se entretiene repartiendo el balón a los receptores. Juega de memoria con Rob Gronkowski y hasta le dio una buena utilidad a Leonard Fournette como ruta de escape.
En defensiva, impacta ver la intensidad y los instintos de varios jugadores. En especial, estos tres: Lavonte David, Vita Vea y Devin Thomas. Espectacular ver como persiguen, como tacklean y como anticipan movimientos rivales. Eso último también indica una parte conceptual que complementa todas la parte física de esos tres jugadores. Les movieron el balón, pero ellos se encargaron de apurar a los jugadores de los Dallas Cowboys. Un equipo completo los Bucs. De los ganadores de la primera fecha, fueron uno de los mejores por su nivel de ejecución.
Ya que mencioné a los Cowboys, también merece una mención Dak Prescott. Casi un año sin jugar y rindió como todo un capitán. Jugó como líder y asumió protagonismo. Hasta resistió golpes por montones. Hizo lo posible de su parte para colocar a los ‘Boys en posición de ganar el juego (estuvieron cerca) y quizás habría que hablar de Dak como el jugador insigne de Dallas, incluso más que Zeke Elliott que por necesidad, pasó más tiempo bloqueando que acarreando el balón. Eso sí, si quieren ser competitivos, tendrían que ocuparse (de una vez) de mejorar su defensiva. Sobre todo, por aire. Siguen igual de permeables que el año pasado.
Simplemente: ¡Me encantó el partido del lunes!. Tuvo de todo. Así, literal. De todo. Parecía que los Ravens tenían todo controlado, pero una serie de sucesos insospechados (…) terminaron favoreciendo a los Raiders, que a pesar de empezar 14 puntos abajo y de cometer errores a destajo, terminaron llevándose el triunfo en la prórroga, en el primer partido que jugaban con público en Las Vegas. Parecía un Monday Night de esos antiguos, cuando solían ser partidos estelares… me refiero a los tiempos en que Hank Williams Jr. entonaba la canción de entrada al evento.
Hay que destacar la valentía y perseverancia de Derek Carr. No hizo una buena primera mitad y estaba comprometiendo a sus receptores, con pases de alto riesgo. Muy de a poco, Carr fue tomando mejores decisiones y repartiendo mejor el balón, en un principio parecía que solo buscaba a Darren Waller. Entre medio, errores varios de los dos equipos e infracciones que fueron condicionando algunas marchas. Así fue como todo el cuarto período y el tiempo adicional fue de lado a lado (en todo sentido). Hubo tres empates solo en el último cuarto reglamentario. Parecía que Baltimore ganaba después de la patada de Tucker, pero los Raiders forzaron el OT con una sublime patada de Daniel Carlson… ¡55 yardas y le sobró distancia!. Como si fuera poco, las tres posesiones de la prórroga tuvieron estos descelaces: intercepción de los Ravens en endzone, balón suelto de Lamar Jackson en 3rd down y por último, el touchdown decisivo – pase de Derek Carr a Zay Jones, un envío cuya forma parecía como si Carr hubiese pegado un home run (…). Ah, y Jones estaba descubierto al recibir el balón. Puras cosas increíbles en la definición.
Algunas observaciones de los Ravens: muy buena jugada de Lamar Jackson, en el pase de touchdown a Marquise Brown, sobre todo por mantener siempre la vista al frente pese a la presión y a tener que salir del pocket. Tenía espacio para correr, pero Lamar tiró un balón preciso a Hollywood. En defensiva, enorme la energía y versatilidad de Patrick Queen. Está en todos lados y siempre jugando con mucha intensidad. También, buenas tackleadas de Marlon Humphrey. Sobre todo, tomando buenos ángulos para hacer esos tackles. Llamó la atención (para mal) Alejandro Villanueva. Muy lento y sobrepasado en varias secuencias contra Maxx Crosby. Quedó expuesto y por ahí llegó la presión a Jackson. Sigo pensando porqué no ayudaron al tackle con otro bloqueador extra…
Otro gran partido fue el Browns x Chiefs. Estos últimos se nota que ya son un equipo top de la liga. Pasaron muchos apuros, pero se las ingeniaron para ganar el partido en el último cuarto. Aquella jugada de 75 yardas de Patrick Mahomes con Tyreek Hill, ¡Wow!. Seguro que tenía su diseño, pero por como se vio, parecía una jugada inventada sobre la marcha. No extrañaría que fuese así. En otro momento, Andy Reid declaró que le da cierta libertad a los jugadores para crear y sugerir nuevas jugadas, que pudieran servir para sorprender a los rivales.
En qué momento pensé que Cleveland iba a perder: cuando el despejador Jamie Gillian casi perdió el balón en un snap y empezó a correr desesperadamente para un costado. Terminó dejando a Kansas City a menos de 20 yardas del endzone, luego Travis Kelce anotó para los Chiefs. Errores clamorosos suelen costar muy caro.
En la sección “yo-lo-dije-primero”: en un Live de NFL Chile que participé el día 6 de septiembre, deslicé la idea que por las características de los equipos, el duelo Dolphins x Patriots quizás pudiera tener baja anotación y quizás los turnovers podrían ser la clave del resultado final. Dicho y hecho: los ‘Fins triunfaron a domicilio, 17-16 y casi al final del juego, un balón suelto de Damien Harris (causado y recuperado por Xavien Howard) terminó sentenciando el triunfo para Miami, que podría ser clave a fin de año, si tienen que definir la clasificación a los playoffs. Uno quizás le haga el quite a los pronósticos, pero eso no quita que uno no entienda o no sepa sobre ciertas tendencias que se dan en los partidos.
Aaron Rodgers quiere puro irse de Green Bay… así al menos denotaba su lenguaje corporal y su rostro fastidiado, en la derrota del domingo contra los Saints. Las dos intercepciones fueron dos balones que rifó al aire. Se notó mucho más en la segunda, donde intentó un pase largo, pero que voló al receptor por al menos 10 yardas. Para peor, la defensiva de los Packers tampoco jugó el partido. De verdad, parecían moverse por inercia y tan solo reaccionando a lo que hacían Jameis Winston, Alvin Kamara y toda la ofensiva de NOLA. ¿Algo para rematar? en la conferencia de prensa post-partido, Matt LaFleur estaba con una feroz cara de hombre derrotado y apenas pudo emitir frases. El receso fue complicado en Lambeau Field y sus alrededores. Este comienzo de liga fue aún más complejo.
Corta y precisa:
- Los Rams cambiaron un ejecutor (Goff) por un jugador (Stafford). El domingo, parecían estar volando sobre la cancha.
- Cooper Kupp: confiable sujeto. Muy confiable.
- Cuestión de tiempo (¿este mismo mes?) para que Justin Fields sea titular en los Bears. El colorín Dalton ya fue, señor Nagy.
- Decepcionante derrota de Buffalo. Sobre todo, por las chances perdidas. Llegaron llenos de expectativas, ¿ahora se estarán llenando de dudas?
- Preciosa espiral en los pases de touchdown lanzados por Russell Wilson. Como para enseñarla a los más chicos.
- Devonta Smith: primera recepción, primer touchdown en la liga. Excelente servicio.
- La primera prórroga del año fue en Cincinnati y casi fue empate (ganó Cincy en la última). Sigo creyendo que debieran probar las prórrogas del College.
- Qué nivel y sobre todo, qué fundamentos aplica Keenan Allen para atrapar el balón.
- Qué impactó más: ¿los 5 TD’s de Murray o los 5 sacks de Jones?
- “With the 1st overall pick in the 2022 NFL Draft, the Detroit Lions select…”
- Daniel Jones: 40 balones perdidos en 28 partidos. Ayayay…
- Ryan Fitzpatrick duró un cuarto. Lo golpearon casi todo ese corto rato y salió lesionado de la cadera. No volvería antes de noviembre. Bendiciones, Football Team (?).
A propósito de los WFT: el domingo estuvo inactivo Sammis Reyes, por lo tanto aún no debuta oficialmente en la liga. No hay que asustarse. Es recién llegado a la liga y es probable que Ron Rivera lo esté llevando de a poco. Eso sí, Washington abre la 2° fecha este jueves (en casa vs Giants). Con el escaso de tiempo para recuperarse y preparar el juego, ¿activarán a Sammis?. Eventualmente, tendría chances de entrar a jugar. Le puede favorecer que está en un equipo con necesidades varias. Y no nos engañemos, al WFT no le sobra el talento. Sino más bien, todo lo contrario.
Hasta pronto.
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