En 2008 descubrimos lo más bajo que se podía caer en la NFL, los Detroit Lions nos enseñaron como hacer la peor temporada de la historia.

Aunque Cleveland con Hue Jackson los emularon, nadie podrá alcanzar el nivel de perfección en lo desastroso que tuvieron los Detroit Lions de 2008. Para entender bien el nivel de vergüenza debemos comprender una cosa. La afición de Detroit y el front office creía que su equipo podía hacer algo mejor. La realidad es que el roster era mediocre a pesar de tener a Calvin Johnson y toda la temporada se basó en intentar conseguir una victoria que nunca pasó. Por eso hay que entender todo lo que paso en pretemporada como un caso de Invent Man (el famoso personaje de La Hora Chanante).

La pretemporada invent

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La canción se llama Put Your Hands Up for Detroit, nunca un nombre explica tantas cosas.

Los Lions llegaban a la primavera de 2008 con el mejor récord de lo que se llevaba de siglo. Cuando ese resultado es un 7-9, ya puedes pensar que las cosas no iban bien en la ciudad de Michigan, pero las cosas podían e irían a peor. Con la afición ilusionada, el trabajo de Matt Millen en el draft está a la altura de los mejores en toda la historia. Y cuando me refiero a los mejores, me refiero a que es físicamente imposible liarla tantísimo en tan pocas rondas. Es un trabajo en el cual supera la locura de Mike Ditka y su decisión de traspasar todas sus rondas por Ricky Williams.

Vayamos por la parte positiva, de este draft provienen Jerome Felton y Cliff Avril. Esto es lo más optimista que se puede decir del grupo de jugadores que llegaron al equipo. En primera ronda, el equipo seleccionó al línea ofensivo Gosder Cherilius. Antes de siquiera llegar al equipo ya estaba envuelto en problemas con la justicia debido a una pelea en un bar en Boston. El jugador fue sentenciado a un año de libertad condicional y además hizo un holdout pero para la semana tres ya era el titular de una de las peores líneas ofensivas que se recuerda. Literalmente había cero talento y estaba totalmente envejecida en aquella línea y aún así no era lo peor del equipo. Evidentemente Cherilius no solucionaría esos problemas pero al menos durante los años siguientes mejoraría.

En segunda ronda el elegido fue Jordan Dizon, el cual antes de que llegase el Draft (6 días antes) también había sido detenido por conducir borracho. El joven no tuvo apenas minutos esa temporada y una lesión en la rodilla le retiraría dos años después de ser drafteado. Finalmente y para completar la genialidad esta el caso de Caleb Campbell. El jugador elegido en 7 ronda provenía de Army, y antes de que pudiese firmar por su equipo, fue enviado a servir. No llegaría a la plantilla hasta 2010 y nunca haría roster. Es cierto que es un séptima ronda, pero esto define perfectamente el tren abocado al desastre que era Detroit.

Pero la pretemporada fue muy positiva. 4 victorias donde la defensa había lucido dominante en tres de ellas y cierto optimismo. El equipo tenía a Jon Kitna como QB, un jugador que sin ser nada extraordinario, era muy competente. Para los fans españoles, también es el QB de Barcelona Dragons cuando conquistaron la NFL Europa. Él sería el encargado de llevar el peso del ataque y de pasar a Calvin Johnson, la principal estrella del equipo. El objetivo era que la defensa mejorase con un entrenador como Marinelli y con ello formar un equipo competitivo y que pudiese soñar con el Playoff. 3 QBs después, lo único que quedaría serían las imágenes de alguna de las jugadas más ridículas de la historia de la NFL.

Para entender un poco el roster y el grado de la mentira, su mejor posición era la de WR con Roy Williams y Calvin Johnson. El problema de aquel ataque sería la anteriormente mencionada línea ofensiva. Kitna, Orlovsky y Culpepper (quién llegaría posteriormente) recibieron tantos golpes que acabaron la temporada con lesiones múltiples. La secundaria de Detroit conseguiría en la temporada… 1 intercepción, mediocre es poco. Incluso dos titulares de esa plantilla estarían fuera en 2009 de la NFL. Respecto al front seven, generaba poca presión aunque era de lo mejor de toda la plantilla. Sobre RB es díficil opinar, no existía hueco para que pudiesen jugar cuando se encontraban con dos o tres jugadores en el backfield en todas las jugadas.

Se destapa la mentira

Una imagen literalmente inexplicable, Orlovsky corriendo por fuera de su endzone.

La ilusión duró exactamente la primera jugada de la defensa en temporada regular. El primer pase de la carrera de Matt Ryan se transformó en un TD y ya arrancaron el partido perdiendo. El juego de carrera de Atlanta masacró (213 yardas un solo jugador) a Detroit mientras que se sucedían los problemas en las jugadas de ataque por ser mal cantadas. En el segundo partido se pusieron por delante de Green Bay en el último cuarto solo para ser masacrados y encajar 24 puntos en los últimos 7 minutos, incluyendo 3 intercepciones de Jon Kitna en estos minutos. El tercer partido frente a los 49ers fue simplemente una masacre donde para más inri lesionaron a Kitna. La primera jugada de Orlovsky sería una intercepción en una screen, algo que no está cerca de ser lo peor que le vimos a Dan.

Con eso llegamos al bye, donde Millen fue despedido por razones obvias. Poco hay que hablar del partido frente a Bears pero el de Vikings sería la primera opción real de ganar un partido. A pesar de que los primeros puntos vinieron por Orlovsky corriendo solo por fuera de la end-zone y provocando un Safety, todo hacía indicar que Detroit tenía el partido dominando ganando 10-2. Tras ello, permitieron dos jugadas de más de cuarenta yardas, las cuales colocaron a Minnesota con la opción de ganar. Igual ocurrió con un fumble provocado a Calvin Johnson y los Vikings ganaron 12-10. Esta derrota provocó que Roy Johnson fuese traspasado y Jon Kitna enviado a la IR, algo que no gustó al jugador. Texans y Redskins también ganarían sin mayores apuros y los Lions se colocaron 0-7, firmando por el camino a Daunte Culpepper. El mismo Culpepper cortado por los Dolphins debido a sus lesiones un año después de costar una segunda ronda.

Aún así, el equipo estuvo cerca de ganar a Chicago. Jaguars sirvió para el debut de Drew Stanton y Carolina golpeó también a los Lions de Culpepper. El equipo de Deroit se pusó 17-0 por encima de Tampa en la primera parte. Al descanso ya iban perdiendo 17-21 y evidentemente el partido acabó con derrota. El único partido televisado a nivel nacional, Acción de Gracias frente a Titans acabó con una derrota de 37 puntos, poniendo un histórico 0-12 en el casillero. Una vez más, la única opción real de victoria sería frente a Minnesota pero el equipo de Detroit sería incapaz de cerrar el partido. Indianapolis, Nueva Orleans y Green Bay simplemente acabaron con el sufrimiento de Lions, en una demostración del rídiculo histórico.

El legado

Nunca una foto ha definido más a una franquicia

Ser el peor equipo de la historia es complicado, pero serlo de una forma tan exagerada es realmente complicado. Incluso los Browns de Jackson tuvieron alguna opción de ganar algun partido. Los Lions solo pudieron ganar (de forma realista y sin ser muy optimista) a los Vikings en el primer enfrentamiento entre ambos equipos y ese histórico safety a Orlovsky lo impidió. Evidentemente desde Marinelli hasta el utillero, todo el staff técnico fue despedido. Kitna fue traspasado, Culpepper se retiraría el próximo año y Orlovsky no sería titular en lo que quedaría de su carrera. La mayoría de la plantilla no llegaría a seguir en la NFL a finales de 2009 e incluso la tragedia golpeó a la plantilla con el fallecimiento de Corey Smith.

Pero aún así hubo ciertos puntos positivos que hay que mencionar. El primero de ellos es que Calvin Johnson logró recibir 12 TouchDowns en esta infausta temporada y se transformó en un HOF sin ningún tipo de debate. Este horrendo año también acabaría con Lions recibiendo el número 1 del draft, el cual usaron en Matthew Stafford. Stafford, al igual que fueron Barry Sanders y luego Johnson, son el único motivo de ilusión para una franquicia que bordea todos los años el rídiculo. Pero esta temporada en concreto es la que define muchos de los actuales chistes y estigmas que sufren los Detroit Lions, siendo vistos como el peor equipo de la NFC en este siglo.

Para empezar, en una división de 4 equipos, son el quinto que lleva más tiempo sin ganar la NFC Norte/Central. Su última victoria divisional, en 1993, implica que el Ford Field ha visto los mismos campeonatos divisionales que el Estadio Metropolitano de Madrid o La Bombonera de Buenos Aires. Literalmente, hace menos años que los Tampa Bay Buccaneers han ganado la actual NFC Norte que los Lions. Igualmente, son la única franquicia que habiendo jugado todas las temporadas de la NFL en la era SuperBowl no han alcanzado una SB. Incluso los Browns se salvan de este dudoso honor por los dos años que se pasaron sin existir. Pero recordemos, los Lions han tenido a un RB y un WR generacional (HOF claro en ambos casos) y uno de los mejores QBs de toda la liga.

Su última victoria en Playoff fue antes de que yo naciese (y conmigo, cualquier lector menor de 28 años). Esa victoria frente a los Cowboys en el 1992 ya es grave, pero para encontrar la anterior victoria en Playoff, habría que acudir a 1957, cuando los Lions se alzaron con la NFC. Para que entendamos lo que deben sentir los fans de Detroit jóvenes voy a poner el baremo desde el día que yo nací. En ese mismo día, Detroit pierde por 10 puntos frente a los Buccaneers en Playoff. Desde entonces, Detroit ha jugado cuatro partidos de playoff contra equipos que nunca pasaron de la siguiente fase:

  • Washington Redskins-Detroit Lions 1999 (8 de enero de 2000) 27-13. Los Redskins caerían en la siguiente ronda frente a Tampa Bay por un marcador de 11-7.
  • New Orleans Saints- Detroit Lions 2011 (7 de enero de 2012) 45-28. Mayor anotación de Detroit en Playoff desde el 95. Los Saints caerían en la siguiente ronda 32-36 frente a San Francisco.
  • Dallas Cowboys-Detroit Lions 2014 (4 de enero de 2015) 24-20. Único partido decidido por una única anotación en esta lista. Dallas caería 26-21 frente a Green Bay.
  • Seattle Seahawks-Detroit Lions 2016 (7 de enero de 2017) 26-6. Peor anotación en Playoff de Detroit desde su derrota por 0-5 con Dallas en 1970. Seattle no superaría a los Atlanta Falcons, con una derrota por 20-36.

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