La que fuera una de las divisiones más fuertes durante la última década, llena de batallas épicas, se ha quedado un poco descafeinada desde hace ya dos años y nada a priori hace indicar que algo vaya a cambiar en este 2018. La Norte de la Americana ha perdido de cierta manera ese esencia que la distinguía como una de las divisiones más duras, de terreno fangoso y luchas de trincheras, solo apta para verdaderos kamikaces.           

CLEVELAND BROWNS

Me vais a perdonar los seguidores de Cleveland pero ya me he cansado. Después de mucho tiempo pensando que podían alcanzar ese punto de inflexión que le devolviera algo de crédito a la franquicia de Ohio, llegando el punto más álgido de esta idea durante la offseason de 2017, solo me queda decir: basta. Me da lo mismo los movimientos que hayan hecho durante la temporada baja, los jugadores, entrenadores o directivos que hayan llegado. Los Browns son una trituradora de profesionales y hasta que no me demuestren lo contrario no cambiaré de idea. Además, sigue al frente del equipo el bueno, o más bien malo, Hue Jackson. 1-31 su rércord al frente del equipo. Sobran las palabras.

Baker Mayfield

De todas formas, vamos a tratar de dejar a un lado la incredulidad que rodea al equipo y echemos un vistazo a su plantilla. En la defensa sigue el grueso de la temporada pasada. Aquí nos podemos encontrar dos versiones, una sin Myles Garrett y otra con él. Garrett es un jugador diferencial y si logra mantenerse sano el salto de calidad de la defensiva está asegurado. Garrett por sí solo hace que la linea defensiva sea muy peligrosa y a este le acompaña una muy bunea linea de linebackers como es la formada por Schobert, Kirksey y Jamie Collins, jugadores que aunque no terminan de dar lo mejor que tienen dentro en cualquier momento pueden explotar. La secundaria se ha reforzado muy bien sobretodo con la llegada vía draft de Denzel Ward. Hay expectativas muy altas puestas en este cornerback de quien se espera buenos resultados desde el primer día. También se espera un crecimiento de Jabrill Peppers en este su segundo año como profesional. Además se suman EJ Gaines, un cornerback más que eficiente y Damarious Randall, quien tratará de encontrar como safety un lugar en esta liga.

En el ataque la buena noticia es que parece que no será Hue quien lleve la voz cantante. Ha llegado como coordinador Todd Haley y aunque a buen seguro le caen muchos palos por parte de los seguidores de Steelers la verdad es que su labor haciendo funcionar ofensivas está fuera de toda duda. La gran incógnita reside en saber quien será el QB titular. Llegó Tyrod Taylor desde Buffalo pero los Browns eligieron con el pick uno global del último draft al flamante ganador del último Heisman Trophy como mejor jugador universitario, el quarterback Baker Mayfield. Sinceramente todos hemos visto lo que Taylor es capaz de dar a sus ataques. Más allá de ser un mariscal que cuida muy bien la posesión del ovoide TT no ofrece mucho más, por lo que creo que Mayfield debería ver campo más pronto que tarde. En la posición de corredor parte con ventaja Carlos Hyde pero tanto el novato Nick Chubb como Duke Johnson, este como amenza aérea en terceros downs, tendrán su oportunidad, sobretodo si llega la siempre habitual lesión de cada temporada de Hyde. Para ayudar al QB en el juego por aire tenemos como principal estandarte a Jarvis Landry, quien parece que va a dejar la posición de slot receiver que le perseguía en Miami y en Cleveland van a tartar del alzarle a la siguiente dimensión como receptor. Otra gran ayuda será el ala cerrada David Njoku, quien tengo la sensación que puede ser uno de los jugadores revelación de este 2108. No nos podemos ir sin mencionar a Josh Gordon, sobre el que aún no sabemos si jugará o no, pero sobretodo no sabemos que versión veremos de él si es que termina vistiéndose cada domingo. Si recupera aquella versión de 2013 el ataque crecerá exponencialmente, aunque esto es mucho suponer.

CINCINNATI BENGALS

Cuando todo hacía indicar que la etapa de Marvin Lewis al frene de los Bengals después de quince temporadas iba a llegar a su fin, el equipo dio una buena imagen para finalizar la Regular Season que permitió y convenció a Lewis de asumir su decimosexto año como head coach. Frente a la opinión popular, tengo para mi que la continuidad de Lewis está más que justificada y que es una buena decisión continuar con él al frente de los bengalís.

Geno Atkins

Con los Bengals me vuelve a suceder lo mismo que me ocurrió el año pasado a días de que comenzara la temporada. Y es que pienso que tienen plantilla suficiente como para pelear por los puestos de playoffs. La defensa funcionó en 2016 mejor de lo que las estadísticas nos pueden arrojar y esta campaña está en disposición de dar un paso adelante. La linea defensiva sigue contando con los incombustibles Carlos Dunlap y Geno Atkins, quienes estarán secundados por los sophomores Jordan Willis y Carl Lawson, jugadores que mostraran buenas maneras en su año de novato, y por el rookie Sam Hubbard, quien irá entrando en la rotación progresivamente. Para apuntalar el juego contra la carrera y solvenar las constantes suspensiones de Vontaze Burfict, ha llegado el linebacker Preston Brown, un jugador de garantías. En la secundaria el equipo ha perdido recientemente a Iloka lo cual hace indicar que hay mucha confianza en lo que viene por detrás, sobretodo en Jessie Bates III, rookie de segunda ronda. Kirkpatrick y William Jackson volverán a dar solvencia a la posición de cornerback.

El ataque me entusiasma, por lo menos en lo que a jugadores de habilidad se refiere, aunque todo pasa por la linea ofensiva, unidad que dio bastante pena el año pasado sobretodo durante la primera mitad de la temporada. Para virar el rumbo la franquicia se ha hecho con los servicios del left tackle Cordy Glenn vía trade y con el center Billy Price vía draft. Si la OL funciona a buen seguro que veremos un tremendo ataque. Andy Dalton ha demostrado que cuando tiene buena protección rinde como el que más por lo que hoy por hoy la posición de QB está bien cubierta. AJ Green luchará una vez más por ser el mejor wide receiver de la competición y la buena noticia llega en el hecho de que parece que por fin veremos jugar a John Ross, el flamante receptor que llegó en 2016 como la primera elección del equipo en el draft y quien no tuvo oportunidades. Mención especial en el juego aéreo para Tyler Eifert, tight end que ya ha demostrado estar entre lo mejorcito de la posición cuando se mantiene sano. Otro jugón que podremos ver en esta ofensiva será al running back Joe Mixon, quien después de una temporada de novato de menos a más está preparado para ser el caballo de batallas de este ataque.

BALTIMORE RAVENS

El futuro de John Harbaugh cada vez está más en entredicho después de que sean ya tres las temporadas sin jugar en enero. Aunque para ser justos hay que recordar que en los dos últimos años se han quedado fuera en el último momento después de dos jugadas puntuales totalmente desafortunadas. Pero la NFL es así, una competición en la que cualquier mínimo detalle te puede dejar fuera antes de que te des cuenta. A su favor tienen el gen competitivo que les ha hecho estar en la pelea a pesar de la escasez de talento con la que contaban y de la plaga de lesiones que les ha asolado desde hace tiempo.

Terrell Suggs

La defensa volverá a ser una vez más la encargada de llevar el peso del equipo. Es prácticamente la misma que la temporada pasada y siempre y cuando el ataque acompañe minimamente la veremos ver dominar partidos. El centro de la linea está fenomenalmente cubierto sobretodo con Brandon Williams y en el pass rush aparece por enésimo año consecutivo el temido Terrell Suggs. Para ayudarle estará Matt Judon quien tuvo un más que decente 2016, pero en esta instancia debe dar un paso adelante Tyus Bowser. Por detrás, un CJ Mosley que cada vez está más cerca de la élite de los middle linebackers, si es que ya no lo está. En la secundaria destaca la pareja de safeties formada por Weddle y Tony Jefferson, pero resulta imprescindible encontrar a un cornerback uno que frene al mejor wide receiver rival en cada partido. Aquí es donde debe aparecer la figura de Marlon Humphrey, quien dejó más sombras que luces en su año rookie.

El ataque ha sido el gran problema de los Ravens desde hace ya varios años y la verdad es que a priori esta temporada la impresión que dan es que es más de lo mismo. Lamar Jackson fue drafteado en la primera ronda mirando al futuro, pero lo cierto es que esta temporada sera Joe Flacco quien vuelva a dirigir el ataque. Si Harbaugh está en la cuerda floja la situación de Flacco es aún más delicada y está ante un año crucial para su carrera. O recupera algo de crédito o en 2019 podría perder su puesto como QB titular de esta liga, ya sea aquí o en otro lado. La unidad de receptores una vez más sigue siendo muy pobre. Cierto que han llegado nuevas piezas como Crabtree, Snead y John Brown pero les sigue faltando ese WR1 que pueda suponer un verdadero quebradero de cabeza para las secundarias rivales. El juego terrestre también ha sido un problema desde no hace poco, aunque parece que Alex Collins está ante la oportunidad de revertir esta situación.

PITTSBURGH STEELERS

Pittsburgh es un asiduo a jugar los playoffs pero llegados este punto se demuestra año tras año que la plantilla se les queda algo corta. El equipo poco o nada a cambiado respecto al de la pasada temporada por lo que no hay nada que parezca que esta vez si pueden ser un verdadero aspirante para llegar a la Superbowl. Estrellas y talento tienen, a lo mejor es el momento de mirar a la banda y ver si ha llegado la hora de buscar una alternativa a Mike Tomlin. Otro entrenador que creo que está ante una temporada importantisima de cara a su futuro al frente del equipo.

Le’Veon Bell

En ataque poco que decir. La triple B seguirá atormentando defensas. Big Ben parece que ha encontrado su segunda juventud, Antonio Brown cada día es mejor y Le’Veon Bell, que aunque sigue de hold out, volverá a ser el principal referente de la ofensiva partiendo desde el backfield. Si nada cambia estamos ante la que parece la última temporda de Bell en los Steelers por lo que a buen seguro que el staff lo exprimirá al máximo, buena noticia para los suyos siempre y cuando evite lesiones. Otro nombre a seguir es el de JuJu Smith-Schuster, quien ya dejara claro en su primer año como profesional que puede sen un receptor de auténtico lujo en esta liga.

La defensa es prácticamente la misma, pero no debemos dejar pasar el hecho de que ya no cuentan con Ryan Shazier después de la desagradable e inoportuna lesión que sufrió el año pasado y que le ha alejado de los emparrillados seguramente para siempre. Su asuencia supone bajar de golpe varios peldaños el nivel global, ya que estamos hablando de un defensor diferencial. No hay ningún jugador que pueda suplir esta ausencia y deberán ser los jugadores de linea elegidos en rondas altas del draft durante el último lustro los que tengan la misión de hacerle olvidar de alguna u otra forma. La nota positiva la pone TJ Watt, quien demostró en su año rookie que puede ser un jugadorazo y una amenza constante para el quarterback oponente desde el rush exterior. La secundaria vulve a ser una vez más la unidad sobre la que se ciernen los mayores interrogantes. Ha llegado Morgan Burnett en la agencia libre y Terrell Edmunds vía draft, aunque a un servidor se le hacen incorporaciones insuficinetes como para que la secundaria se vuelva tan siquiera digna.

Por Stéfano Prieto

@Stefano_USA

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