Para un servidor la división más divertida de la NFL. La razón, que nadie sabe nunca lo que va a pasar. Aquí no valen de nada las previas y predicciones, el que un equipo la haya roto el año anterior o que otro fuera una decepción. La Este de la Nacional sufre una extraña a la vez que apasionante metaforfósis año tras año y el ejemplo lo tenemos en que desde 2004 nadie consigue repetir campeonato divisional en temporadas consecutivas.
NEW YORK GIANTS
Los Giants han sido uno de los conjuntos más movidos durante la offseason. Sin ir más lejos, ha cambiado todo su staff técnico y gerencia, tratando de encontrar el rumbo del triunfo de perdieron en un 2017 lleno de nubarrones. Pat Shurmur llega para hacerse cargo de un vestiario que se mostró totalmente vulnerable ante las adversidades. El ex coordinador ofensivo de los Vikings tendrá antes sí una nueva oportunidad para mostrar su valía como head coach después de pasar de puntillas por los Browns.
Eli Manning comenzará una vez más como QB titular y lejos queda ya el día que vio truncada su racha de titularidades y que sepultó definitivamente la andadura de McAdoo en New York. Manning ha demostrado que ya no está para muchos trotes y aunque muchos opinan que el enorme bajón de juego que sufrió en años anteriores es debido a la incompetencia de su linea ofensiva, otros creemos que el declive de Eli es definitivo. No obstante, cierto es que este año si podrá contar con mayor protección y que además estará acompañado por una figura en el backfield que tratará de recuperar el desaparecido juego de carrera de los Giants. La mega estrella del college football Saquon Barkley está llamado a ser un running back élite durante mucho tiempo, por lo menos la apuesta de la franquiciá en él está fuera de toda duda. Como amenazas aéreas los de Nueva York contarán con el gran Odell Beckham Jr., quien al final consiguió el ansiado contratazo. Beckham estará secundado por Sterling Shepard y por el tight end de segundo año Evan Engram, quien quiere demostrar que la buena imagen mostrada en 2017 no fue casualidad.
En la defensa ha habido varios cambios de cromos pero los hombres claves siguen estando. Damon Harrison como timón frente al juego terrestre rival, Olivier Vernon como amenaza en el pass rush, Landon Collins como multiusos y Janoris Jenkins como shutdown corner son jugadores estelares en sus respectivas posiciones. Encontramos así una defensiva totalmente cimentada en la que además surgen otros nombres que si rinden a un nivel medio-alto harán que esta defensa vuelva a entre las mejores de la competición como así sucediera en 2016.
WASHINGTON REDSKINS
Para mí uno de los tapados de la Nacional. Los Redskins llevan tiempo siendo uno de esos conjuntos que un domingo te deja con la boca abierta y al siguiente da una imagen digna del número uno del draft. El reto de Jay Gruden será alcanzar una regularidad que permita a los capitalinos ser de verdad aspirantes a todo.
Esta irregularidad mostrada hasta el día de hoy se ha debido en gran medida a la falta de consistencia del que fuera su quarterback hasta la temporada pasada, Cousins. Pero paliar esto, ha llegado a DC el QB más regular de la liga por antonomasía, Alex Smith. Todos sabemos que el ex de los Chiefs jamás te va a perder un encuentro y aunque muchos piensen que tampoco te lo va a ganar, viene de regalarnos su mejor versión y de demostar a sus detractores que puede ser muy peligroso cuando desde la banda le dan rienda suelta a sus habilidades. Smith estará secundado por una linea ofensiva que si se mantiene sana es de lo mejor que podemos encontrar a lo largo y ancho de la liga y aunque en el backfield han sufrido el contratiempo de la lesión del rookie Guice, la franquicia se ha hecho en el último momento con el veterano Adrian Peterson, quien puede aportar mucho desde la posición de running back a poco que le quede un minímo de gas en el depósito. Tampoco podemos olvidarnos de un Chris Thompson que puede ser una de las revelaciones del año. En el juego aéreo los Redskins pueden ser un dolor de cabeza para cualquier secundaria siempre y cuando el tight end Jordan Reed se mantenga alejado de todo tipo de lesión y que el receptor Josh Doctson terminé de explotar y que haga que las escasas perlas que nos ha dejado hasta el momento se vuelvan constantes cada domingo.
En la defensa Washington cuenta con unos de los front seven más potentes de la conferencia. La llegado de Da’Ron Payne con el primer pick del equipo en el último draft ha terminado de apuntalar una linea defensiva donde Jonathan Allen demostró el año pasado su calidad hasta que se lesionó. En los edges vuelven Preston Smith y Ryan Kerrigan, dos jugones que muchas veces pasan desapercibidos y en el centro de los linebackers Zach Brown tratará de dar consistencia en el juego frente a la carrera. La secundaria estará una vez más encabezada por el magnífico cornerback Josh Norman y aunque es cierto que el resto de unidad se me hace algo corta de talento es el citado frente de siete el que debe facilitar el trabajo a los de atrás.
DALLAS COWBOYS
El Equipo de America tratará de volver a la normalidad después de un 2017 convulso debido a las idas y venidas de las sanción de Ezekiel Elliot. Esta temporada esperan recuperar esa imagen que en 2016 los hizo parecer en muchas ocasiones como un conjunto intratable y que lo colocaron entre los favoritos de la Nacional. La mayor de las incógnitas es ver si Jason Garrett está capacitado para darle al equipo ese plus que necesita para ser de verdad uno de los cocos de la competición.
La defensa ha sido durante mucho tiempo el talón de aquiles del equpo y aunque sigue estando a un par de piezas de ser verdaderamente peligrosa, tengo la sensación que este año si puede subir un par de escalones su nivel de juego. La campaña pasada finalmente pudimos ver al Demarcus Lawrence que todos llevábamos esperando desde que fue drafteado en 2014 y si a él se le suma esta campaña Taco Charlton, los Boys podrían contar con un pass rush de auténtico lujo. El centro de la linea defensiva deja más dudas pero estas desaparecen cuando miramos para atrás y vemos una unidad de linebackers de muchísimos quilates. El rookie Leighton Vander Esch se suma a Jaylon Smith, quien debe demostar que realmente está preparado para abanderar al grupo cuando la estrella de este defensa, Sean Lee, no esté, algo recurrente temporada tras temporada. En la secundaria hay más cantidad que calidad y uno de los puntos a seguir será ver si algunos de los tres sophomores con los que cuentan, Awuzie, Lewis y Woods dan un paso adelante.
De todas formas todo en los Cowboys pasará una vez más en lo que sean capaces de hacer en ataque y concretamente en el juego de carrera. Todo parte con la linea ofensiva y con Zeke y si esto sigue funcionando los tejanos serán un hueso duro de roer ya que una vez que establecen la amenana terrestre todo lo demás va rodado. Incluido un Dak Prescott que dejó muchas dudas cuando no contó a su lado con el fabulso running back. Tengo para mí que a Prescott se le encumbró demasiado pronto y personalmente no tengo una opinión muy clara de él. Me da la sensación que es más un game manager que un verdadero mariscal líder sobre el que pueda recaer el peso de una ofensiva. Para más inri, Prescott apenas contará con ayuda en cuanto a armas aéreas se refiere. El roster está exento de una referencia en la posición de wide receiver, de hecho, me atrevo a decir que esta es la peor unidad de receptores de la liga. Por si fuera poco, Witten se ha retirado por lo que tampoco cuentan con esa válvula de escape que suponía el legendario ala cerrada.
PHILADELPHIA EAGLES
El campeón. Los Eagles tienen ante sí uno de los retos más complicados que podamos encontrar en el deporte mundial. Si ya es difícil ganar un Superbowl conseguir el anillo dos años de forma consecutiva es misión imposible. No obstante, Philadelphia tiene equipo para lograrlo y sobretodo un entrenador como la copa de un pino. Me parece que la labor que hizo el año pasado Pederson es de lo más impresionante que he visto en mucho tiempo.
Resulta difícil de entender como Jim Schwartz no se hizo con una de las vacantes de entrenador principal después del último Black Monday. Para alegría de los aficinados de Philadelphia el excelente coordinador defensivo volverá a deleitarnos con ese magnífico frente de cuatro que hace estragos en las lineas ofensivas rivales. Además, y por si fuera poco, durante la offseason han reforzado la unidad, lo que hace que cuenten con una rotación de jugadores inimaginable hasta hace poco. Todo en la defensa de los Eagles empezará con los Cox, Graham, Barnett, Bennett, Long y Ngata. Ojo ahí. En la unidad de linebackers han perdido efectivos pero vuelve de lesión su mejor jugador, Jordan Hicks. La secundaria sorprendió en 2017 a propios y extraños y nada hace indicar que bajen un ápice su nivel de juego esta temporada. Además, recuperan a un jugador que en su temporada rookie no vio campo debido a una lesión. Habrá que estar muy atentos con lo que sea capaz de hacer el cornerback Sidney Jones.
En la ofensiva Pederson sigue sin nombrar a su QB titular aunque todos sabemoso que tarde o temprano será Carson Wentz el que vuelva a estar al frente de los suyos en detrimento del flamante MVP del Superbowl Nick Foles. Wentz demostró en su segundo año que es un jugador diferencial, llamado a estar en la élite de la posición durante mucho tiempo siempre y cuando aprenda a cuidar su salud. En el backfield destaca Jay Ajayi pero no debemos olvidarnos del resto de running backs como son Sproles, Clement o Smallwood, los que unidos a una de las lineas ofensivas más dominantes de la liga hacen que el juego terrestre de Philadelphia sea temido por todos. Jeffery volverá a ser la principal amenza aérea pero el recién llegado Mike Wallace, el recuperado para la causa Agholor y sobretodo el tight end Zach Ertz, le dan una serire de variantes al juego aéreo muy interesantes. La conexión Wentz-Ertz es de lo más peligroso que podemos encontrar a día de hoy en la liga, sobretodo a partir de la zona roja.
Por Stéfano Prieto
@Stefano_USA
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